A continuación, os presentamos las ideas más importantes recogidas por las secretarias de los distintos grupos de trabajo y que, posteriormente, se pusieron en común en gran grupo
GRUPO DE TRABAJO 1
“Los niñ@s aprenden más y mejor mediante la experiencia y la práctica”. El grupo de debate 1 pensamos que en la pública hay alternativas. Tenemos que formarnos, auto-formarnos y asociarnos con personas, asociaciones y/o sindicatos que luchan por una nueva escuela pública y con compromiso social.
Tenemos que informarnos sobre pedagogías alternativas, compartir experiencias, también a través de la red para que sea más fácil y funcional toda esta información.
El profesorado de secundaria destaca que tienen poca formación pedagógica y consideran interesante saber más sobre estas pedagogías.
Hay que informar y trabajar con las familias, que sean la base de la cooperación en el aprendizaje del niñ@.
También es importante trabajar con grupos de trabajo y gente que se comprometa con esta nueva metodología.
Dentro del grupo de estudiantes de la Universidad de Almería, se pide que exista una mayor implicación con ell@s para que puedan conocer más sobre estas metodologías. También destacan que la UAL tiene una semilla de innovación con respecto a educación y que les gustaría seguir “alimentando” esta semilla contrastando con experiencias reales.
GRUPO DE TRABAJO 2
Tres palabras necesarias para el cambio, mostrar/compartir que hay otras formas de trabajar en la escuela, contagiar y convencer. La experiencia de muchos compañeros y compañeras que han apostado por otras formas de trabajar les ha dejado esta enseñanza. Cuando se percibe, se ve y se siente que funciona, hay más predisposición por parte de otros docentes de subirse al carro.
Muchos compañeros encuentran barreras en la burocracia, desde dentro y desde fuera, pero existen opciones (siempre hay caminos), hay que tener claro lo que quieres hacer y buscar el apoyo de compañeros/as, grupos de docentes que te ayuden a mantener la ilusión y a compartir tus logros y también tus fracasos (necesarios para aprender y seguir avanzando).
Poníamos el acento en el desarrollo de la capacidad crítica del alumnado y también en la participación democrática, sabiendo que no es cuestión de un día sino de una práctica continuada y con sentido.
Abogábamos por el trabajo de acercamiento y no de crítica entre maestros/as y familias. Nos necesitamos, las familias tienen que entrar a formar parte activa de la comunidad educativa y los maestros/as tenemos que tenderles la mano, porque si lo hacemos, responden.
Es importante fortalecer en la escuela la voz del alumnado y el objetivo del desarrollo de personas para vivir en sociedad, para lo que es fundamental que la escuela recupere el corazón y no lastre la creatividad, ni el aprendizaje de la gestión de las emociones propias y las relaciones con los demás. También poner el acento en los procesos y creer en lo que estamos haciendo, aunque cometamos errores. Porque hay que valorar los trabajos propios y de los compañeros/as que funcionan y saber valorar con perspectiva los que salen peor, para mejorar, o cambiar si es necesario.
Empezábamos diciendo que si no creyéramos que otra escuela es posible, no estaríamos allí… y es que la voluntad de transformar es el motor.